domingo, 1 de mayo de 2011

Los empleos más demandados no son los que eran

Hay muchos factores para afirmar con certeza que no va a ser el mes del empleo, de la reestructuración de plantillas y de la reactivación del mercado laboral. 

¿La culpa? De la crisis. Se va a notar especialmente en Andalucía, comunidad muy vinculada al sector de la construcción, donde el número de desempleados ha aumentado este año más de un 25%, y va a destruir en torno a 11.000 puestos de trabajo. Otras como Madrid, la Comunidad Valenciana y Aragón, conseguirán crear empleos este año por encima de la media nacional. Donde menos parece que va a incidir la crisis será en el País Vasco, que registrará el menor incremento de parados y será una de las comunidades que genere más empleo.

De las conclusiones del informe se extrae, asimismo, que es difícil predecir cuándo se estabilizará el mercado laboral y por el momento no se augura ninguna recuperación. Los efectos de la crisis parece que se prolongarán hasta 2010.

Con este panorama, cambian las características del perfil del desempleado e incluso de los puestos de trabajo que van a desaparecer, aunque también nacen oportunidades en una situación como la actual.

Oportunidades de empleo ante la crisis

Telemarketing, energías renovables, telecomunicaciones y sanidad son, según Adecco, algunos de los sectores que mantienen o incluso aumentan la demanda de empleados. Es decir, sectores a quienes la crisis toca de lejos.

Así, en el caso de la Sanidad española, tanto pública como privada, existe un importante déficit de médicos y enfermeras que tiene su raíz en la futura jubilación de la cuarta parte de los médicos españoles colegiados, la construcción de nuevos hospitales y centros de atención primaria y la Ley de Dependencia, que incrementa aún más la necesidad de recursos humanos en este ámbito.

Por otro lado, las posibilidades de nuestro país en Energías Renovables lo convierten en un sector puntero para el empleo, no sólo en número de puestos de trabajo, sino también de calidad, pues las estimaciones apuntan a la creación de 89.000 empleos directos y 99.000 indirectos en los próximos años con un 80% de contratación indefinida. Desde ingenieros hasta electricistas y electromecánicos se precisan para cubrir una demanda que crece por momentos.

Oportunidades de empleo se encuentran también en el sector de las Telecomunicaciones. Según el análisis de Adecco, la carencia de profesionales cualificados en tecnologías de la información “supone el mayor reto de futuro para las empresas del sector”. Y es que se están creando centenares de puestos tanto en energía, como en defensa, transporte, infraestructuras o banca y, mientras tanto, de las universidades no salen suficientes candidatos para cubrir esta demanda, y eso que seis de cada diez estudiantes de estas titulaciones están trabajando antes de terminar la carrera.

Ser comercial es otra posibilidad pues es ahora precisamente cuando las empresas otorgan un valor añadido al Área Comercial para atenuar los efectos económicos adversos y evitar pérdidas. En muchas ocasiones no se requiere experiencia previa, solamente habilidades comunicativas y dotes comerciales.

Son dos aptitudes muy importantes también para trabajar en otro sector en auge ante la crisis: el Telemarketing. Los perfiles de operador de venta telefónica, operadores de atención al cliente y gestores de cobros son los de mayor demanda.

Por otro lado, la demanda de profesionales con formación técnica procedentes de Formación Profesional es constante, de ahí que la tasa de paro en su caso sea inferior al 5%. Entre otros, los que cuentan con una mayor demanda son los mecánicos, electricistas, albañiles, carpinteros y soldadores.

Y, por último, el sector de Distribución y gran consumo, ya que la proliferación de “marcas blancas” de productos de primera necesidad (buena calidad y menor precio) hace que sean necesaria la labor de promotores, reponedores, manipuladores y empaquetadores. 

¿Cómo sortear la crisis?

Ser polivalente y flexible. Esa es la conclusión a la que llega Adecco en su informe explicando para ello que “el trabajador en paro necesita desarrollar de forma especial una serie de competencias que se hacen imprescindibles para encontrar una nueva alternativa profesional”.

Por tanto, destaca que hay que tener voluntad para adaptarse a los cambios y reciclarse continuamente. Y recuerdan: “La formación, por tanto, es la pieza clave en todo este proceso de transición profesional”.